A pesar de los avances significativos logrados en las últimas décadas, desafíos persistentes en el empleo, la educación, la participación política y social o la violencia hacia las mujeres, nos recuerdan que debemos continuar trabajando en la igualdad de oportunidades.
Por eso, como un paso adelante en nuestro compromiso continuo por eliminar las barreras que impiden la plena igualdad de género para construir una comunidad más justa y equitativa, el Ayuntamiento de Santander ha aprobado el IV Plan de Igualdad de Oportunidades entre mujeres y hombres, que recoge los ejes estratégicos, objetivos y actuaciones que, de forma transversal, el Ayuntamiento a través del Centro de Igualdad, realizará durante los próximos cuatro años.
El IV Plan de Igualdad de Oportunidades entre mujeres y hombres se estructura en torno a cinco líneas estratégicas que abordan los ámbitos más críticos para la igualdad de género:
Con el fin de impulsar la implicación de toda la comunidad y mejorar la coordinación entre las distintas instituciones y agentes sociales, la primera línea estratégica del IV Plan de Igualdad tiene como objetivo la implicación activa de estas entidades en el diseño y ejecución de políticas y programas que promuevan la igualdad de oportunidades. En concreto, se propone incrementar el principio de igualdad dentro de la administración local, asegurando que todos los departamentos municipales incorporen una perspectiva de género en sus proyectos y se capacite al personal en esta área crítica.
La segunda línea estratégica tiene como objetivo general facilitar la conciliación de la vida personal, familiar y laboral de ambos géneros. Con este propósito, se han desarrollado objetivos específicos y acciones para sensibilizar sobre la importancia de la corresponsabilidad en tareas domésticas y de cuidado, y para fomentar la corresponsabilidad desde la educación primaria. Las acciones incluyen campañas de sensibilización y talleres de habilidades domésticas y destrezas para ambos sexos para promover una distribución más equitativa de las responsabilidades en el hogar.
Además, se busca mejorar el acceso a recursos de apoyo a la conciliación como permisos parentales y prestaciones y se planea expandir los servicios municipales que facilitan la conciliación, como las ludotecas y los programas de apoyo. Paralelamente, esta línea fomenta el impulso de iniciativas para mejorar el acceso de las mujeres al mercado laboral y al autoempleo y para ayudar a mujeres en situación de vulnerabilidad a acceder a formación y empleo.
Con el fin de promover valores, actitudes y conductas que refuercen la igualdad de oportunidades entre géneros, la tercera línea estratégica se centra en la educación.
Bajo el primer objetivo específico, el plan busca fomentar la coeducación y modificar estereotipos y roles sexistas entre estudiantes. Esto incluye la integración de la igualdad y la prevención de la violencia de género en los currículos escolares, así como el desarrollo de talleres y campañas dirigidas a la comunidad educativa - estudiantes, profesorado y familias-para diversificar las opciones profesionales más allá de las limitaciones impuestas por el género.
El segundo objetivo se enfoca a involucrar a madres y padres en la promoción de una igualdad efectiva en el hogar, ofreciendo recursos como guías y talleres sobre la corresponsabilidad en las tareas de cuidado y el uso no sexista de juegos y juguetes. Por último, el tercer objetivo busca desafiar los roles de género tradicionales y combatir comportamientos sexistas en la sociedad en general, mediante campañas en redes sociales y talleres sobre nuevas masculinidades y feminidades, destinados a personas de todas las edades.
Para abordar la violencia contra las mujeres el objetivo general de la cuarta línea estratégica es prevenir cualquier forma de violencia contra las mujeres y ofrecer una atención integral a las víctimas. Esta línea estratégica incluye una serie de objetivos específicos destinados a modificar actitudes y estereotipos desde la infancia, impulsar la educación afectivo-sexual en adolescentes, y sensibilizar a toda la ciudadanía sobre las diversas formas de violencia y las acciones para prevenirla.
Dentro de las acciones propuestas se incluyen talleres educativos en los centros escolares para abordar la violencia de género, campañas de sensibilización dirigidas a la comunidad educativa y la población en general y la promoción de talleres sobre relaciones afectivo-sexuales saludables. Además, se busca involucrar a los padres en la educación para la igualdad y en la prevención de conductas violentas, desarrollar campañas específicas en contextos festivos y de ocio y realizar intervenciones con personas que ejercen violencia. También se contempla la prestación de servicios de asesoramiento y asistencia psicológica, social, jurídica y laboral especializada para las víctimas de violencia y sus familias.
Por último, la quinta línea estratégica del IV de Igualdad de Oportunidades entre mujeres y hombres se centra en mejorar la salud física y mental y la calidad de vida de mujeres y hombres, asegurando que las actividades deportivas, artísticas y culturales reflejen y respondan a las necesidades de ambos géneros de manera equitativa.
Las acciones planificadas incluyen campañas de información y sensibilización sobre cómo los roles de género influyen en la salud, con un enfoque especial en los cuidadores y en el autocuidado tanto de mujeres como de hombres, programas contra el sedentarismo, el uso indebido de psicofármacos o el fomento de la salud sexual y reproductiva compartida. Además, esta línea busca proporcionar soporte emocional a las personas mayores, implementar medidas para aumentar la visibilidad y el apoyo a colectivos de mujeres afectadas por discriminación múltiple, fomentar la práctica deportiva entre mujeres, eliminando estereotipos, impulsar la creación y producción artística e intelectual femenina y reconocer el trabajo histórico del movimiento feminista.